El Logroño La Rioja logró una trabajada victoria en la pista del Bada Huesca (28-29) en un partido que fue muy igualado en la primera parte y en el que en la segunda fue para un equipo visitante que tras adquirir una renta de cinco goles no supo rematar el partido ante un rival que luchó hasta el final y que una vez más la suerte le dio la espalda al fallar un penalti en el último segundo.
Comenzó bien el partido el Bada Huesca, que fue por delante en el marcador hasta los primeros diez minutos, cuando ya se igualó el marcador y se sucedieron los empates hasta el ecuador de la primera parte. Ninguno de los dos equipos logró imponer su ritmo al rival y las ventajas que uno y oro fueron de uno o dos goles que rápidamente eran neutralizadas por el rival, por lo que los empates se sucedieron hasta casi el final de los primeros treinta minutos, aunque al final de la primera parte el Logroño logró dos goles de renta (12-14).
Ninguno de los dos equipos se pusieron nerviosos y jugaron con gran aplomo y serenidad sabiendo en todo momento lo que debían hacer. Ambos equipos tenían más problemas en la parcela ofensiva ante la buena defensa de cada equipo, bien resguardados por sus porteros.
Tras el descanso pronto puso tierra de por medio el equipo riojano y ya en los primeros cinco minutos disponían de una renta de cinco goles, lo que le permitía jugar con más tranquilidad, y al Bada Huesca le hizo remar contra corriente y volver a sufrir una vez más.
Plantó cara el equipo local en todo momento y no bajó los brazos pese a que siempre en la segunda parte fue siempre por debajo con desventajas de entre tres y cinco goles, lo que hizo que el partido estuviera vivo hasta el final.
A falta de siete minutos para el final llegaría una reacción a base de coraje por parte de Bada Huesca, que redujo la diferencia a tan sólo un gol (23-24) que le dio emoción al partido hasta el final.
Los tres minutos finales transcurrieron con tan sólo un gol de diferencia favorable al Logroño. Empató el partido el Bada Huesca a falta de cuarenta segundos y con la última posesión para Logroño se señaló una pena máxima favorable al equipo visitante a diez segundos para el final que logró anotar, mientras que Bada Huesca falló un penalti en el último segundo que le hubiera dado el empate.
