Los jugadores del conjunto dirigido por Oriol Ferré y Álvaro Vergara, y que han contado con Juan Carlos Gabas y Pedro Gavín como delgados, han vivido una experiencia inolvidable este fin de semana. Experiencia intensa y sufrida, pero a la vez gratificante.
El equipo oscense ha tenido que superar una complicada temporada, marcada por las restricciones y los cambios, con situaciones difíciles y que mermaban la motivación, pero al final las ganas y la ilusión por seguir jugando a Balonmano han hecho que los jugadores hayan superado estas adversidades, y no hayan dejado de entrenar y mejorar.
Este esfuerzo les llevo a lograr realizar una liga regular positiva, donde se lucharon todos los partidos, independientemente del resultado final de los mismos, logrando así clasificarse entre los 4 mejores equipos de Aragón, quedando en 3ª posición.
Tras este primer éxito, el conjunto se enfrentaba a un nuevo reto, el tener que afrontar el Sector donde iban a tener que jugar con los otros 3 mejores equipos de Aragón en un fin de semana, 3 partidos de altísimo nivel, pero una oportunidad de demostrar todo el trabajo que llevaban realizando durante meses.
Estos tres partidos han sido increíbles. Se empató a 28 en la primera jornada ante el campeón de la liga regular, el Ademar Zaragoza, en un partido que se llegó a dominar pero en el que las fuerzas al final se agotaron, y donde no se logró la victoria por muy poco. En el segundo partido se consiguió la victoria ante Dominicos A, y mantenía las posibilidades de luchar por el Campeonato, sin embargo, una reclamación por parte del equipo rival, por un gol que no subió en el marcador, hizo que el Comité de Competición diera el partido por empatado a 26, y la opción de quedar campeones desapareciera. A pesar de ello, el equipo volvió a competir en el último partido como hasta el momento, algo que le dio la victoria por 21 a 29 frente a Dominicos B, y que supuso el merecido Subcampeonato de Aragón, que jugadores y técnicos celebraron por todo lo alto.
Cómo hemos comentado, ha sido una experiencia inolvidable para jugadores, técnicos y familiares, pero sobre todo un premio para todos ellos por el esfuerzo y trabajo realizado durante muchos meses, por el que el Club se siente muy orgulloso.
