Carlos Molina, viejo conocido en la ciudad oscense, vuelve once años después para reforzar al Bada Huesca. El jugador, ya formó parte del primer equipo del Club Balonmano Huesca durante dos temporadas (2013-2015).
En su primera temporada, el equipo consiguió su mayor gesta desde su fundación y es que fue capaz de obtener una plaza europea para la temporada siguiente. El equipo a batir fue el Eskilstuna sueco, pero desafortunadamente el gol average no favoreció a los oscenses para continuar en la competición.
El lateral izquierdo, de 33 años, 2,01 metros de altura y 105 kg de peso, llega procedente del SC Pick Szeged (Hungría), aunque cuenta con una amplia trayectoria a sus espaldas.
El próximo lunes recibirá la bienvenida del club y sus compañeros y estará preparado para ayudar al equipo.
